La asociación público-privada contempla una inversión estimada de hasta US$ 3.000 millones y proyecta una producción anual de 75 mil toneladas de litio equivalente. El acuerdo busca posicionar a Chile como líder en minerales críticos, con altos estándares ambientales y beneficios para el Estado y las comunidades.
La Empresa Nacional de Minería (ENAMI) confirmó a Rio Tinto como su socio preferente y operador para el desarrollo del proyecto de litio Salares Altoandinos, en la región de Atacama. La alianza contempla una inversión estimada de US$ 3.000 millones sujeta al desarrollo de estudios, y representa un hito clave en la implementación de la Estrategia Nacional del Litio impulsada por el Gobierno de Chile.
“ENAMI ha sido una empresa activa en la implementación de la Estrategia Nacional del Litio, y con esta asociación culmina un proceso iniciado en mayo del 2024 con un llamado abierto en el que participaron empresas de clase mundial. Después de un exhaustivo análisis, concluimos que la propuesta que entrega mayor valor para ENAMI es la de Rio Tinto”, afirmó el vicepresidente ejecutivo de ENAMI, Iván Mlynarz.
El proyecto, ubicado en los salares Aguilar, La Isla y Grande, cuenta con más de 15 millones de toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE), lo que lo convierte en la iniciativa greenfield con mayor cantidad de recursos de litio en Chile. Las proyecciones preliminares indican una capacidad de producción de hasta 75.000 toneladas anuales, utilizando tecnología de Extracción Directa de Litio (EDL) para reducir la huella ambiental y preservar el equilibrio hídrico.
El director ejecutivo de Rio Tinto, Jakob Stausholm, destacó:
“Es un honor haber sido seleccionados por ENAMI como el socio preferido para el proyecto Salares Altoandinos, que tiene el potencial de convertirse en un yacimiento de litio de clase mundial. Agradecemos la oportunidad de fortalecer nuestra asociación con ENAMI […] y de apoyar el posicionamiento de Chile como uno de los principales productores mundiales de minerales críticos para la transición energética”.
El acuerdo establece que Rio Tinto adquirirá una participación inicial del 51%, mientras que ENAMI conservará el 49% y mantendrá incidencia en el gobierno corporativo del proyecto. El directorio será integrado por tres representantes de Rio Tinto y dos de la estatal chilena. La inversión inicial comprometida por Rio Tinto asciende a US$ 425 millones e incluye capital en efectivo, activos valorizados, el uso de su planta demostrativa en Argentina y el licenciamiento de su tecnología EDL.
El proceso de selección fue liderado por un equipo multidisciplinario de ENAMI y aprobado de forma unánime por su directorio. Contó con la asesoría legal de Carey y Cía. y financiera de ASSET Chile.
Impacto económico y social
Cumpliéndose los supuestos de producción y proyecciones de mercado, el proyecto Salares Altoandinos generará más de US$ 15.000 millones para el país durante todo su ciclo de vida. Estos ingresos consideran aportes para el Fisco, gobiernos regionales y municipales, financiamiento para investigación y desarrollo, y beneficios directos a las comunidades indígenas que participaron en procesos de consulta previa.
“Esta alianza público-privada da garantías para ejecutar un proyecto con altos estándares ambientales, con respeto a las comunidades y en beneficio de la Región de Atacama y del país en su conjunto”, sostuvo Mlynarz.
Rio Tinto, empresa anglo-australiana con más de 150 años de trayectoria y presencia en 35 países, opera una cartera diversificada que incluye hierro, cobre, litio y aluminio. Su enfoque en la sostenibilidad y la innovación tecnológica busca responder a los desafíos globales en la transición hacia una economía baja en carbono.
Por su parte, ENAMI continuará avanzando en su mandato estatal de promover la pequeña y mediana minería, y ejecutar proyectos estratégicos de litio junto a Codelco, en línea con la política minera del Gobierno del Presidente Gabriel Boric.
