El dirigente de la CPC anunció la apertura de tres oficinas regionales en 2026 y una hoja de ruta para alcanzar presencia en todas las regiones al 2030, reforzando el rol del organismo en la modernización del empleo en Chile.
En una ceremonia celebrada el pasado 1 de agosto en Santiago, Jorge Riesco Valdivieso fue nombrado presidente del directorio de ChileValora, en representación de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC). Con una visión ambiciosa para el futuro del organismo, Riesco ha planteado la necesidad de establecer tres nuevas oficinas regionales durante el año 2026, con el objetivo de que para 2030 cada región de Chile cuente con su propia Oficina Regional de ChileValora. Este esfuerzo es parte del compromiso del nuevo liderazgo para ampliar el acceso a la certificación de competencias laborales, una herramienta crucial que busca incrementar la empleabilidad y la productividad en el país, especialmente en un contexto marcado por los desafíos del sector laboral.
El traspaso de la presidencia de ChileValora, que ocurrió en un momento de luto por la muerte de un trabajador en la minería, resaltó la importancia del tripartismo en el desarrollo del país. En este encuentro, titulado «Certificar para crecer: competencias, trabajo y futuro», participaron destacados representantes del Estado, empleadores y trabajadores, incluyendo al ministro del Trabajo, Giorgio Boccardo, y la presidenta de la CPC, Susana Jiménez. Este acto no solo marcó un cambio en el liderazgo, sino también el compromiso de los actores involucrados en mejorar las condiciones del mercado laboral chileno a través de una certificación efectiva de las competencias laborales.
El ministro Boccardo destacó el papel fundamental de ChileValora, el cual se centra en el reconocimiento de las trayectorias laborales de quienes muchas veces son invisibilizados. Según el ministro, la capacidad de ChileValora para responder rápidamente a las nuevas necesidades y tendencias del mercado laboral es crucial. Esto no solo contribuirá a mejorar la calidad del empleo en Chile, sino que también permitirá una distribución más equitativa de los beneficios del trabajo, lo que se alinea con la visión de un país más justo y desarrollado.
En su visión para ChileValora, Jorge Riesco enfatizó la necesidad de expansión territorial, proponiendo que las nuevas oficinas regionales faciliten el acceso a la certificación en áreas donde actualmente no está disponible. Esto sería un componente esencial en la modernización del servicio, aprobada por unanimidad en el Congreso Nacional en 2024. Por su parte, la directora ejecutiva de ChileValora, Ximena Rivillo, apoyó esta perspectiva, subrayando la importancia de escuchar a los trabajadores y reforzar la institucionalidad para crear caminos que fortalezcan tanto a las personas como a las empresas, alineándolos con los desafíos de desarrollo del país.
La ceremonia concluyó con un panel donde representantes de empresas como Metrogas y Aguas Andinas compartieron experiencias positivas sobre la certificación de competencias laborales, destacando cómo estos procesos no solo benefician a los empleados, sino que también son esenciales para las organizaciones en términos de competitividad y desarrollo del capital humano. La alta valoración de los empleadores sobre la certificación refleja un consenso creciente sobre su impacto positivo en la motivación de los trabajadores, en la detección de brechas de desempeño y en la mejora general del ambiente laboral, consolidando así el papel de ChileValora como un actor clave en el futuro del empleo en el país.
