La compañía, con operaciones en Biobío y Goiás, obtuvo US$5 millones de la DFC para financiar el estudio de factibilidad de Carina, hito que impulsó sus acciones en Toronto y refuerza su estrategia de construir una cadena de valor de tierras raras desde Sudamérica.
Aclara Resources (TSX: ARA), controlada en un 57% por el Grupo Hochschild, anunció que la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de Estados Unidos (DFC) comprometió hasta US$5 millones para el desarrollo del proyecto Carina en Goiás, Brasil. Los fondos se destinarán al estudio de factibilidad que la compañía espera concluir a inicios de 2026, y cuya pre-factibilidad será presentada este mes.
El espaldarazo de Washington disparó un 17% las acciones de Aclara en la bolsa de Toronto, reflejando la confianza del mercado en una compañía que apunta a reducir la dependencia mundial de China en tierras raras, minerales clave para la electromovilidad, la energía eólica y la tecnología de defensa.
Aunque Carina es considerado el activo insignia, Aclara también avanza en Chile con el proyecto Penco, en la Región del Biobío, que busca producir a partir de arcillas iónicas con un proceso de bajo impacto ambiental. Este módulo cuenta con una planta piloto y una alianza con CAP para la producción de aleaciones, además de una asociación estratégica con el fabricante global Vacuumschmelze para integrar la cadena de imanes permanentes.
Ramón Barúa, CEO de Aclara, destacó que el financiamiento es “una validación de la estrategia de la compañía” y un primer paso hacia compromisos mayores de parte de DFC una vez finalizado el estudio de factibilidad.
El proyecto Penco, aunque de menor escala que Carina, es estratégico para el país, ya que posiciona a Chile como parte de la incipiente red de suministro de tierras raras pesadas fuera de China. Se estima que el yacimiento podría aportar 62.900 toneladas de óxidos de tierras raras (TREO), y la compañía proyecta iniciar producción hacia 2028, en paralelo al desarrollo de Carina.
El interés de EE.UU. por apoyar a Aclara se entiende en el marco de la pugna por asegurar cadenas de suministro críticas. China concentra el 90% de la oferta mundial de tierras raras, mientras que Aclara proyecta que Carina, una vez en operación, podría equivaler al 13% de la producción anual china.