La iniciativa contempla una planta con capacidad de hasta 200 MW para abastecer faenas mineras y reducir su dependencia de combustibles fósiles. El proyecto busca disminuir emisiones locales y consolidar a Chile como referente regional en la producción de hidrógeno verde.
El Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) ha emitido un dictamen favorable a la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del innovador proyecto «Planta de Producción de Hidrógeno Verde para el Distrito Minero de Calama», presentado por Susterra SpA. Este ambicioso proyecto, que representa una inversión de 441 millones de dólares, tiene como objetivo la generación de hidrógeno verde en la región de Calama, en una zona marcada por su actividad minera y su potencial para implementar energías más limpias.
La planta se instalará en una Concesión de Uso Oneroso (CUO) a 15 kilómetros al suroeste de Calama y se desarrollará en tres etapas estratégicas. La primera fase considera un prototipo con una capacidad inicial de electrolisis de 20 MW, sentando las bases para futuras expansiones. La segunda fase permitirá aumentar esta capacidad a 100 MW, y la tercera y última fase llevará la capacidad total de la planta a 200 MW, aumentando considerablemente la producción de hidrógeno verde.
El objetivo principal de la planta es abastecer a las faenas mineras cercanas, buscando sustituir el consumo de combustibles fósiles en diversas etapas del proceso minero, tales como fundición, refinación, transporte y procesos térmicos. Se prevé que esta iniciativa no solo ayude a reducir la huella de carbono de la industria minera, sino que también establezca un modelo de producción más sostenible y respetuoso con el medio ambiente en la región.
Adicionalmente, el desarrollo de esta planta de hidrógeno verde aportará a una disminución significativa de las emisiones de contaminantes locales, entre ellos, material particulado, óxidos de nitrógeno y dióxido de azufre. De este modo, el proyecto promete no solo ser un pilar en la transición hacia energías más limpias, sino también mejorar la calidad del aire en las comunidades circundantes, en una región que históricamente ha enfrentado desafíos ambientales relacionados con la actividad minera.
La favorable calificación del SEA es un paso crucial que refleja el compromiso del país con el desarrollo sostenible y la innovación energética. A medida que el mundo se dirige hacia una economía baja en carbono, el proyecto de Susterra SpA podría posicionar a Chile como un líder en la producción de hidrógeno verde en Latinoamérica, fomentando no solo el crecimiento económico, sino también contribuyendo a los objetivos globales en la lucha contra el cambio climático.