La resolución enviada a Contraloría prolonga los acuerdos actuales con SQM hasta 2030 e incorpora nuevos contratos con Codelco y Minera Tarar SpA hasta 2060. El plan, enmarcado en la Estrategia Nacional del Litio, busca mayor participación estatal, sostenibilidad ambiental y beneficios directos para comunidades atacameñas.
La Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) ha hecho un importante anuncio al presentar ante la Contraloría General de la República (CGR) la resolución que aprueba las modificaciones a los contratos establecidos para el Proyecto en el Salar de Atacama y el Arrendamiento de Pertenencias Mineras OMA con SQM Salar SpA. Estas modificaciones extienden la vigencia de los contratos hasta 2030, además de incluir nuevos contratos de arrendamiento con Codelco y su filial Minera Tarar SpA, que entrarán en vigor en 2031 y se extenderán hasta 2060. Este acuerdo es un paso significativo para asegurar la continuidad de la explotación del litio y otros recursos minerales en el Salar, promoviendo además una producción más sostenible mediante la adopción de nuevas tecnologías, y la sustitución del uso de agua continental en sus procesos de producción.
Según el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente, este acuerdo está alineado con los objetivos establecidos en la Estrategia Nacional del Litio, que busca incrementar la participación estatal en las rentas generadas por este mineral y fortalecer la producción en un contexto de creciente demanda global. Esta asociación con la empresa estatal Codelco y SQM se presenta como una oportunidad para elevar los estándares de sostenibilidad ambiental y social en la minería, garantizando un enfoque responsable tanto en la explotación del litio como en el futuro manejo de otros minerales presentes en la salmuera.
Antes de presentar la propuesta a la CGR, Corfo llevó a cabo un proceso de Consulta Indígena, una condición necesaria para la validación de estos contratos. El Consejo de la Corporación aprobó la versión final el 15 de septiembre, la cual establece un sistema de pago de arrendamiento vinculado al precio del litio y otros productos, beneficiando a las comunidades locales y organizaciones indígenas atacameñas. Este sistema incluye aportes para el desarrollo territorial en la región de Antofagasta, así como inversiones en proyectos que buscan fomentar el desarrollo sustentable en las comunas afectadas.
Los nuevos contratos también enfatizan la importancia de la investigación y el desarrollo (I+D) en Chile, destinando recursos para financiar actividades que promuevan un crecimiento económico sostenible. Además, mantienen cláusulas que permiten vender a precios preferenciales productos de litio a empresas seleccionadas por Corfo, fomentando así el desarrollo de industrias con mayor valor agregado en el país. Durante la Consulta Indígena, un elemento clave fue la participación activa del Pueblo Lickanantay, asegurando que sus intereses y preocupaciones fueran tomados en cuenta, lo que contribuye a la estabilidad y gobernabilidad de los acuerdos.
Uno de los enfoques centrales de los nuevos contratos es el cuidado del medio ambiente. A través de un marco normativo que respeta las regulaciones existentes y los estándares internacionales, se establece un compromiso para reducir progresivamente el uso del agua continental en las operaciones mineras. Las empresas deberán presentar en 2026 un Estudio de Impacto Ambiental para el proyecto Salar Futuro, y se implementarán planes para monitorizar el cumplimiento de los estándares ambientales. Además, se facilitará la participación activa de las organizaciones representativas del Pueblo Atacameño en la supervisión de estos compromisos, garantizando así una relación de colaboración continua entre el Estado, las empresas mineras y las comunidades locales.